Análisis de la columna de Carlos Marín
Ok. De acuerdo con la lógica del Señor Marín como Amnistía Internacional no protesto en contra de esos gobiernos autoritarios por lo tanto Amnistía Internacional no tiene la autoridad moral para señalar la violación a los derechos humanos por parte del ejército. Es decir si yo cometo un crimen y existe la prueba de mi crimen, pero la persona que me acusa y que es testigo de mi crimen nunca acuso a mis vecinos cuando ellos cometieron crímenes, entonces esas acusaciones en contra mía no valen. Que no se supone que un periodista debe tratar de investigar a fondo este tipo de acusaciones, luchar por encontrar la verdad. Parece que es anticuado eso de andar investigando acusaciones de violación de derechos humanos y andar tratando de hacer ver los errores del gobierno, pa que investigar si es mas fácil tomar el lado del gobierno ¿verdad señor Marín?
A continuacion columna de Carlos Marín
Una sensata inquietud
El asalto a la razón
Carlos Marín Fuente: Milenio.com
Quizá en Amnistía Internacional se desconozca que desde su nacimiento, en junio de 1990, la Comisión Nacional de Derechos Humanos ha recibido 118 mil 539 quejas, de las que 6 mil 556 corresponden a la Secretaría de la Defensa Nacional, pero de las que emitió nada más 82 recomendaciones… entre las dos mil 49 que ha hecho en 19 años al gobierno federal.
¿Sabrán en la prestigiada organización que la Sedena ha aceptado todas esas recomendaciones y que tiene una relación permanente con la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para la Atención de los Derechos Humanos?
Anoche, en Tercer Grado, Carlos Loret de Mola planteó una sensata inquietud:
Si Amnistía Internacional (según su representante en México, Alberto Herrera) promoverá movilizaciones en el mundo (frente a 150 embajadas) para protestar por las “violaciones del Ejército a los derechos humanos”, ¿por qué jamás organizó una sola contra las dictaduras carniceras de Augusto Pinochet en Chile, Idi Amín Dada en Uganda, Sadam Husein en Irak o Pol Pot en Camboya?